Simon Kress vivía solo en una gran mansión situada entre montañas áridas y rocosas a unos cincuenta kilómetros de la ciudad. Y así, cuando tuvo que ausentarse inesperadamente por asuntos de negocios, no dispuso de vecinos de los que pudiera aprovecharse para dejarles al cuidado de sus animalitos.
George R.R. Martin
¡¡Al fin!!
A menudo se hace eterna la espera desde que entregas un trabajo hasta que este por fin ve la luz. Y este, en particular, tenía muchas ganas de verlo publicado. Entre otras cosas para poder leer el libro entero. He de reconocer que George me ha cautivado por completo con sus historias. Ideales para evadirse de los asuntos mundanos y adentrarse en universos fascinantes.
La ilustración de portada está basada en Los reyes de la arena. Relato contenido en este volumen 2 de la autobiografía literaria de George R.R. Martin. Sin dar pistas se puede decir que es una historia en la cual la situación se torna mas turbia a cada paso de Simon, su protagonista.
Lo malo de ilustrar un relato como este es que, de las mil escenas estupendas que encuentras página tras página, NO puedes ilustrar una sola para no destripar su lectura antes incluso de abrir el libro.
En este caso -y prácticamente siempre que hablemos de portadas- trato de contextualizar y evocar sin destripar el texto. De modo que la ilustración de portada va cobrando sentido según avanza nuestra lectura y todos los elementos que aparecen en ella van encajando en su lugar.
Si al ver este libro en una librería piensas que es de terror y que le van a pasar cosas chungas a alguien, entonces el objetivo está cumplido.
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